Rutas de oleoturismo cerca de Córdoba
Córdoba y sus alrededores ofrecen una experiencia única donde el patrimonio andaluz se fusiona con el sabor del aceite de oliva. A través de sus rutas de oleoturismo, es posible recorrer centenarios, visitar almazaras tradicionales y descubrir pueblos con encanto, todo mientras se degusta uno de los productos más emblemáticos de la región: el oro líquido andaluz. En El Lagar te contamos todo.
La tradición olivarera en Córdoba: un legado milenario
La provincia de Córdoba tiene una de las tradiciones olivares más antiguas de España, arraigada en un paisaje que lleva siglos moldeado por el cultivo del olivo. En los tiempos de los íberos y romanos, el aceite de oliva era un producto fundamental en la vida cotidiana y en la economía de la región. Prueba de ellos son los restos arqueológicos de prensas romanas encontrados en zonas como Baena y Montoro.
Durante la época andalusí, esta herencia se enriqueció aún más con nuevas técnicas agrícolas y sistemas de riego que mejoraron el rendimiento de los olivares. Desde entonces, el olivo se ha mantenido como símbolo de la identidad cordobesa, tanto en lo económico como en lo cultural.
Hoy en día Córdoba sigue siendo una de las zonas más importantes de España en la producción de aceite de oliva virgen extra. Sus aceites, tienen prestigio por su calidad y sabor.
Pero más allá del producto, el olivo representa una forma de vida. Muchos agricultores siguen trabajando la tierra como lo hacían sus abuelos, respetando la naturaleza y cuidando el paisaje. Pasear entre los olivares cordobeses es una manera de conocer su historia, su cultura y el alma de Andalucía.
Principales zonas olivareras cercanas a Córdoba capital
Cerca de Córdoba se encuentran algunas de las zonas olivareras más importantes de Andalucía. Que permite descubrir pueblos como Montilla, Priego de Córdoba, Bujalance… Donde el aceite de oliva es parte esencial de la vida, la cultura y el paisaje.
Ruta por la Campiña Sur: Montilla, Puente Genil y Baena
La Campiña Sur cordobesa es una zona clave del oleoturismo, con olivares que producen algunos de los mejores aceites de Andalucía.
- En Montilla, las almazaras familiares combinan tradición y catas guiadas, a menudo junto con experiencias enoturísticas.
- Puente Genil mezcla modernización e historia agrícola, y ofrece productos artesanales elaborados con AOVE.
- Baena es el corazón del aceite con DOP, con visitas imprescindibles como el Museo del Olivar y almazaras donde se produce un aceite reconocido internacionalmente. Esta ruta permite descubrir el sabor, el saber y la cultura del olivo en su máxima expresión.
Ruta por la Subbética Cordobesa: Priego de Córdoba y su DOP
La Subbética cordobesa, con sus montañas y suelos ricos en minerales, es una de las zonas olivareras más prestigiosas de Andalucía. En el corazón de esta región está Priego de Córdoba, famoso por su aceite de oliva virgen extra de Denominación de Origen Protegida (DOP) que destaca por su aroma intenso y sabor equilibrado.
Una visita imprescindible es El Lagar, una almazara situada en Carcabuey, dentro del Parque Natural de las Sierras Subbéticas. Alli la tradición y la innovación se unen para producir aceites galardonados como Oleo Subbética, reconocidos internacionalmente por su calidad y sabor frutado. En El Lagar se puede recorrer todo el proceso de producción, desde la aceituna hasta la botella, y participar en catas que muestran la riqueza sensorial de sus aceites elaborados principalmente con variedades hojiblanca, picuda y picual.
Ruta del Alto Guadalquivir: Bujalance y Cañete de las Torres
Esta ruta pasa por una zona tranquila y muy ligada al olivar. En Bujalance, los campos de olivos lo llenan todo. Su aceite es fuerte y sabroso, y se puede visitar alguna almazara para ver cómo se hace y probarlo directamente.
Muy cerca está Cañete de las Torres, un pueblo rodeado de olivos que cuida mucho el campo y sus tradiciones. Es un lugar perfecto para conocer de cerca cómo se vive y se trabaja el olivo en la campiña cordobesa.
Oleoturismo todo el año: ¿cuándo es mejor viajar?
El oleoturismo se puede disfrutar durante todo el año, pero cada época ofrece una experiencia diferente. Si quieres ver el proceso de recogida de la aceituna y cómo se hace el aceite, lo mejor es viajar entre noviembre y enero, en plena campaña. Es cuando las almazaras están en plena actividad, y muchas abren sus puertas para mostrar el trabajo en directo.
En primavera y otoño, el paisaje es especialmente bonito, con temperaturas suaves y buena luz para pasear entre olivos, hacer catas o visitar pueblos. Además, hay menos turistas, lo que hace que la experiencia sea más tranquila y personal.
Durante el verano, aunque hace más calor, muchas almazaras siguen ofreciendo visitas y actividades. Es un buen momento para disfrutar de la gastronomía local y descubrir los usos del aceite más allá de la cocina, como en cosmética o productos artesanales.
Para vivir el oleoturismo de forma auténtica, El Lagar es una visita imprescindible. En plena Subbética y dentro de la DOP Priego de Córdoba, esta almazara ofrece recorridos, catas y aceites premiados. ¡Descubre el alma del aceite andaluz!